jueves, 28 de agosto de 2008

HISTORIA- POST 3- LA ´LÍNEA DEL DESTINO

Después de aquella conversación, el mar sonaba diferente para ella. No sabía lo que había ocurrido, pero había algo, en su interior, que le había dicho, que aquella no era la mejor forma de vivir. Que tenía que salir de ese agujero en el que se encontraba. Así que cogió sus maletas, a la mañana siguiente, y aceptó aquel trabajo que le había ofrecido en Sevilla. De camino hacía el lugar en su seat Ibiza acabado de comprar, pensaba que era lo mejor que podía haber hecho. Cambiar de aires para que su corazón experimentara otros lugares o zonas en los que posarse.

Y así fue. La primera noche de estar en el lugar conoció a alguién, se trataba de Luis. Un chico simpático, carismático e ilusionado con ella. Al principio era se mantuvo rehacia para comenzar una relación con él, porque no podía dejar de pensar en Marcos, pero con el tiempo supo conocer esos nuevos ojos, que le ofrecían una nueva perspectiva de la vida.

7 comentarios:

Ale dijo...

A mi siempre me resultó extraño el cambio de aire, el pensar que porque uno se va lejos del lugar donde está la persona que nos quita el sueño eso va a dejar de suceder. Y creo que muchas veces es contraproducente; es decir, nos hace recordar más a esa persona. Porque los sentimientos no entienden mucho aquello de irse lejos, se van con uno. Nos siguen a donde sea que vayamos.

Lo que sí puede pasar es atreverse a conocer a alguien más, pero no por irse lejos, sino porque una persona se nos atravesó en la mirada y logró quitar al menos un segundo de nuestra atención en aquella otra persona. No se trata de haberse ido lejos, sino más bien de haber cambiado de aire pero por dentro, queriendo hacerlo.

O al menos es lo que hoy en día me parece que pasa cuando uno intenta superar algunas cosas.

Beso

TUITA dijo...

Sí, puede ser. Lo que ocurre es que al cambiar de aires, ya no ves las cosas que te recuerdan a él. El hecho de conocer cosas nuevas te crea ilusión y ésta hace que no nos sintamos solos.

OaBy dijo...

ale> Por supuesto es relativo a cada individuo, pero alejarse de un lugar compartido ayuda al bombardeo de recuerdos en todo aquello que te rodea en lo cotidiano. Coincidiendo con tt, un cambio de aires supone básicamente nuevas distracciones y nuevas fuentes de inspiración.

tt> Siguiendo la anterior observación, sé de gente que no sólo no supera la situación al cambio de aires, sino que se aferra allá donde migre. ¿Necesidad de atención, gritos que reclaman cariño o cierto carácter psico-masoquista? Uff

TUITA dijo...

Sí, estoy de acuerdo Oaby. Hay gente que cambia de aires y se lleva los problemas. Puede que por falta de caríño u otros problemas.

Quijo - Meli Polo Fdez dijo...

El cambio de aires no sólo supone un cambio de lugar, para que se produzca debe existir un verdadero deseo.

Javier Muñoz dijo...

los deseos nos mantienen en pie. hacen que cada día te levantes y te vayas a dormir para levantarte de nuevo. Quizás sean el motor del alma, los deseos y todo lo que conllevan.

Mucho tiempo ausente u más que me queda muy a mi pesar. Suerte, un beso enorme.

cuídate amiga.

TUITA dijo...

Javi: Yo también estoy últimamente ausente en el blog. Intento hacer lo que puedo jejeje

Un besazo enorme Javi!!