martes, 19 de agosto de 2008

HISTORIA- POST 1 - LA LÍNEA DEL DESTINO

Era una noche de verano, calurosa, estrellada y en la que soplaba un viento ligero, de esos que te hacen estremecer, de los que te ponen los pelos de punta. Cada vez que soplaba el viento la piel de Marta se ponía de gallina. Era como si su alma gemela rozara su piel de vez en cuando para que ella notara su presencia. Pero él no volvía o no quería volver y ella se preguntaba cada noche, cada día, cada tarde como era posible.
El amor, se preguntaba, mientras leía su libro preferido, sin hacer caso omiso a lo que decía la novela, era tremendo, pero a la vez cruel. No podía dejar de pensar en aquella cara llena de lágrimas que se despedía para no volver. Pero la situación era así, no podía estar cada noche sin dormir, pensando en que algún día él cogería su maleta y se presentaría en su puerta. Una mañana, concretamente a las nueve menos diez, como de costumbre, Marta caminaba hacia el trabajo. Al ladear su cabeza observó las letras de un bar, se llamaba Lacius. Entró, se sentó en una mesa, y se tomó un café porque aún le sobraba tiempo. Cogió el periódico que estaba en la mesa donde se sentó y comenzó a hojearlo. Lentamente pasaba las hojas, descubriendo tras ellas, que los sucesos la inundaban. Pasaron diez minutos y continuó su andadura hacia el trabajo. LLegó se sentó en su mesa y comenzó a leer el correo electrónico que había llegado a su bandeja de entrada. Las teclas del ordenador acariciaban la yema de sus dedos haciendo que vibrara un sonido a antiguo, pero eso no le llegó a molestar porque se encontraba en su mundo, en su espacio pequeño. Cada mañana se levantaba con dos esperanzas: por un lado que Marcos regresara y por otro que todos aquellos pensamientos no fueran más que recuerdos de un pasado muy lejano, que le había pasado factura, pero que había olvidado por completo.

2 comentarios:

Ale dijo...

Esta historia sigue, no? Porque quiero opinar cuando la haya leído entera. Solo te firmo para que sepas que estoy atento y que no te tardes en seguirla porque me quedo ansioso jajaja.

Besos

TUITA dijo...

Si, esta historia sigue. Quiero hacer capítulos de una breve historia que siempre he tenido en la mente, pero que nunca he escrito. Gracias por estar atento.
Siento haber estado ausente en un tiempo. El trabajo no me deja relajarme. Muchos besos y sigue así en tus post que me encantan de verdad.

Besos !!!